
Sentía las miradas de todos... y escuchaba a lo lejos lo que parecía un eco… “quédate conmigo”.
Recostado sobre el piso, sintió como una lágrima caía por su mejilla.
Pensó "mi corazón está llorando, porque yo no me siento triste”, mientras su vida se escapaba por su muñeca.
Aun contenía la respiración para hacerlo más rápido.
El dolor cesaba, como había previsto, y nublaba poco a poco sus sentidos.
Al final, la nota que con su último aliento sostenía, cayó.
TE EXTRAÑO..
1 comentario:
lindo pero triste
hoy me esta pasando lo mismo :(
Publicar un comentario